Comer en USA es algo que es sumamente fácil, pues a cada paso que das te puedes encontrar con una franquicia alimentaria de comida rápida sin ningún tipo de problema, ya sea un Wendy´s, Taco Bell o McDonald´s. En Nueva York, pasa un poco parecido pero sobre todo, los Neoyorkinos comen en la calle a todas horas, así que, no dejéis de hacer lo mismo.
En cualquier carrito ambulante os podrán preparar unos deliciosos «Chicken or beef over rice», «Hot Dogs», «Cheeseburguers» y también el riquísimo «Phillycheestake», no podéis iros de NY sin probar éste último, no sé muy bien como explicar qué es, pero os dejo una foto.
Los carritos ambulantes en Nueva York son algo más de la ciudad y hay en casi cada esquina de sus grandes avenidas, hay de comida rápida, pero también puestos de frutas, helados y otros en los que te hacen en el momento un riquísimo zumo de frutas.
Respecto a las salidas nocturnas, salimos por bares de Manhattan de la séptima avenida y también alrededores de la quinta. Muchos de los pubs tienen estilo irlandés pero hay bastante ambiente y por supuesto, bebimos unas «Budweisser» Americanas.
Hay bares y sitios geniales para tomarse algo en barrios como Tribecca y también el Soho, barrios donde hay muchísimas tiendas y mucha gente joven. Los camareros son muy simpáticos y la gente está dispuesta a entablar conversación con extraños.
Si queréis degustar un buen plato de pasta con albóndigas gigantes, mi recomendación es de «The Meatball Shop» en Bedford Avenue 17, en el barrio de Williamsburg. Un barrio de lo más «Hipster». El sitio tiene un estilo genial, la comida es buena y el servicio estupendo.
Si queréis ver una tienda con variedad de productos ecológicos y productos de calidad no dejéis pasar las tiendas «Dean & Delucca» en el barrio del Soho podréis encontrar una en una de sus calles principales junto a las tiendas de grandes marcas de ropa.
Me gustaría recomendar Bryant Park junto a la biblioteca nacional o el imponente y maravilloso Central Park para saborear los platos de comida rápida que compréis, son experiencias únicas, aunque luego queráis desesperadamente una manzana o un trozo de sandía. Por supuesto, podéis llevar vuestro café en la mano como un Newyorker más.
Es curioso que cuando visitamos Toronto, nos costó mucho más encontrar un sitio para comer, apenas había carritos de comida y al final, terminamos en un «Hooters» un restaurante también de hamburguesas, pizzas, etc, estilo «Foster Hollywood» solo que las camareras iban en pantaloncitos cortos y con buen escotazo, muy estilo película americana…
Resumiendo, en Nueva York hay de todo tipo de restaurantes, siempre os saldrá más barato un Hot Dog que un bol de frutas, pero también las hay, así que no vale la excusa de » es que no hay otra cosa». Solamente recomiendo salir de fiesta y dejaros llevar por ese «buenrollismo» que tienen los americanos, no os defraudará.
Viajar es con V de Vida 